Los publicistas desarrollan muy diversas técnicas para que las empresas que los contratan destaquen sobre los miembros de la competencia. Los tapetes con logotipo ya no son los únicos elementos decorativos que se pueden personalizar, y hoy encontramos muy diversos soportes en los que las marcas se hacen notar, llegando incluso a convertirse en un elemento más de la vida cotidiana. Por eso no es raro encontrar publicidad en parasoles, alfombrillas, jarrones, tazas, cuadros, sillas… y un sinnúmero de diferentes productos promocionales con un eslogan que intente enganchar y a la vez llamar la atención sobre lo que esa empresa en concreto nos ofrece que no nos ofrece el resto.
Otras frases se han introducido tanto en la vida cotidiana que incluso se recuerdan sin saber a veces quién fue la empresa que las lanzó, algo que a algunas no los agrada demasiado ya que después de hacer un desembolso en publicidad a veces no les ha generado los ingresos que esperaban